Petit Plaer, empresa de los hermanos Alfons y Dolors Subirana. Acaba de relanzar al mercado la horchata Siper. Una marca histórica en Barcelona cuyos derechos han comprado para los próximos años.
La Siper era una horchata artesana fresca que dejó de embotellarse ya iniciado este siglo. Tras el acuerdo con el antiguo propietario. “hemos recuperado el formato de botella de vidrio, tenemos el mejor fabricante de horchata de Valencia y hemos adaptado a las necesidades actuales la receta original”, explica Alfons Subirana. La Siper actual está pasteurizada y caduca a los 21 días, y este año está presente en exclusiva en las cadenas Bonpreu y Condis.
Petit Plaer fue fundada hace ocho años para producir y comercializar productos especiales y prémium de alimentación en la gran distribución. Su producto estrella hasta ahora eran los huevos ecológicos. Que producen en una granja de 5.000 gallinas en Catalunya. Y hace un año y medio, Subirana decidió construir en Mallorca su propia granja con 1.300 gallinas, cuyos huevos comercializa en el mercado balear.
El renacer de la Siper tiene un componente emocional, explica. El padre de Subirana fue presidente de la cooperativa de leche del Montseny Corele. Que repartía leche fresca en Barcelona, y en verano. También horchatas artesanas, entre ellas la Siper. “Las repartíamos en el camión”, recuerda. La cooperativa cerró y Alfons Subirana trabajó en gran distribución, hasta que hace quince años fundó Làctics del Montseny. Para dar salida comercial a productos de pequeños elaboradores, con la marca Granges del Monsteny. En la gran distribución de Catalunya y Baleares. Además de comercializar otros productos. Luego creó Petit Plaer para especializarse en nuevos productos selectos. Lactics del Montseny tiene ahora unas ventas estables por encima del millón de euros, asegura.
Petit Plaer cerró el 2017 con 350.000 euros, y espera este año, gracias a la Siper, llegar a 450.000. “Hemos decidido apostar por el vidrio reciclable, es un formato que funciona y queremos desarrollar nuevos productos alrededor de los lácteos ecológicos y recuperar marcas antiguas, dice Alfons Subirana.
Fuente: La Vanguardia